(Bueno, para los próximos 1.000)
31/12/13
Un modesto deseo para el próximo año
28/12/13
Villancico laico (más o menos)
al hombre nuevo que va a nacer.
El valor y la fortuna
se pelearán por abrirle la cuna.
Es tan vivo y tan gracioso
que no te acuerdas de ver si es hermoso.
¡Vente, niño!, vamos a ver
a ese sol nuevo que quiere nacer.
Vente a ver cómo ha brotado
la llama viva del fuego apagado.
Llorará sin fundamento
y se le olvida cuando está contento.
No comprende el churumbel,
pero tampoco nosotros a él.
¡Vente, prima!, vamos a ver
la luna nueva que empieza a crecer.
Vente a ver como ha salido
la rama fresca del árbol partido.
No podrá ver el futuro,
pero sabrá vivir inseguro.
Será igual que otro cualquiera
pero a su estilo y a su manera.
¡Vente, amigo!, vamos a ver
la fuente clara que rompe a correr.
¡Vente, amigo!, vamos a ver
si el hombre nuevo pudiera nacer.
Música y voz: Amancio Prada
Letra: Chicho Sánchez Ferlosio
23/12/13
Una pesadilla anual
Se podrá engañar a unos pocos durante mucho tiempo.
Se podrá engañar a muchos durante poco tiempo.
Pero no se podrá engañar a muchos durante mucho tiempo.
Tengo muchas dudas sobre la última parte: "Pero no se podrá...". En efecto, uno de los comportamientos humanos, al menos en España, anual, cíclico y recidivante como si de una enfermedad social se tratase me hace tener esas dudas. Me refiero al fenómeno de la lotería de Navidad. Es tal la cantidad de sandeces y supersticiones —alentadas, ¡¿cómo no!?, por los media— que se perciben alrededor de tal fecha como ayer por dicho sorteo y entre tanta gente, o al menos así parece retumbar en las televisiones, que creo que sí se puede engañar a muchos durante mucho tiempo... al menos durante varios días cada año.
22/12/13
El Roto x 2
Son las dos últimas viñetas —¡no humorísticas, por favor!— de EL ROTO, de ayer y de hoy. Un genio, sin duda.
16/12/13
Patriotismo/patrioterismo
Parejas famosas (4)
Otras Parejas famosas
(1-1), (1-2), (1-3), (2), (3), (5)
15/12/13
¡Adiós, Mr. Adelson!
Por cierto: ¿qué habrá sido de la obsequiosa sonrisa?
12/12/13
A veces me cuesta entender los titulares
1) Cómo es que el Ínclito utiliza un trasvase para enviar un mensaje. ¿Por qué no manda un correo?
2) Cómo ha hecho el envío. ¿En una botella?
3) En todo caso, por qué utiliza un trasvase que no pasa por Cataluña. ¿Hay alguna hijuela que pase por allí?
¡Bah! A lo mejor luego vuelvo y leo el pie de foto. De momento me voy directamente a las viñetas de El Roto y del Forges y a las Cartas al director, secciones que con alguna cosilla más son de las pocas que se salvan del periódico. Lo que no se salva, desde luego, es el tocho publicitario de hoy de 48 págs. a todo color, del tamaño del periódico, encartado, que le llaman, aunque quizás fuera más propio decir emboscado. Por si no estuvieran claras las intenciones, al engendro publicitario lo llaman Shopping.
11/12/13
No dejéis que los niños...
¡Feliz Navidad!
9/12/13
«Hombre lobo»
No estoy seguro de que ese periodismo emerja de zonas tan obscuras como el escritor afirma: creo que es establecer una relación fuera de lugar, una relación, pudiéramos decir, en cortocircuito. Pero, sí, es cierto lo del periodismo amarillo. En estos días, los medios —en especial la televisión sin escrúpulos— se están pegando un auténtico y obsceno festín con lo de las excarcelaciones, sólo que de ese festín ha participado también el conspicuo representante de la prensa seria, el susodicho diario.
En efecto, y como ejemplo de lo que digo, el titular a cuatro columnas del día 28 de noviembre: «Salen los otros bárbaros de los 90», que, como mínimo, alentaba la indignación ante las puertas de la cárcel de quien "la severa justicia aguarda que castiga al malo". Parece pues que ni siquiera la prensa menos dada al amarillismo ha podido sustraerse a éste, a cambio, probablemente, habrán calculado, de ganar unos cuantos lectores.
8/12/13
Empecinarse
4/12/13
Que no, ciclistas de acera: no cuela
Pues bien, teniendo en cuenta los siguientes datos:
a) mi velocidad de marcha rápida es de 5 km/h
b) esa mitad de la distancia, medida sobre un plano, es de 55 m
c) la distancia desde Inspector hasta la av. de Leganés es de 225 m,
un sencillo cálculo nos da que la velocidad del ciclista sería de más de cuatro veces la mía, o séase de más de 20 km/h.
Pero sea lo que se quiera de estos cálculos, la velocidad de una bicicleta tiene que ser como poco de 8 a 10 km/h, lo mínimo para mantener el equilibrio, unas 2 veces la velocidad de peatón, y eso a paso más bien rápido, a paso de caminata, porque si es a paso de paseo o de una persona que no quiere o no puede andar más rápido, esa velocidad de 8 a 10 km/h puede suponer hasta el cuádruple. Por tanto, déjense de tratar de vendernos la bici los ciclistas de acera diciendo que van a velocidad moderada o a paso de peatón y que controlan: es una falacia; son ganas de defender lo indefendible.
2/12/13
Fruta del tiempo
Arde en sus ojos una fosca lumbre,
que repugna a su máscara de niño
y ademán de piadosa mansedumbre.
Conserva del obscuro seminario
el talante modesto y la costumbre
de mirar a la tierra o al breviario.
Devoto de María,
madre de pecadores,
por Burgos bachiller en teología,
presto a tomar las órdenes menores.
Fue su crimen atroz. Hartóse un día
de los textos profanos y divinos,
sintió pesar del tiempo que perdía
enderezando hipérbatons latinos.
Enamoróse de una hermosa niña,
subiósele el amor a la cabeza
como el zumo dorado de la viña,
y despertó su natural fiereza.
En sueños vio a sus padres —labradores
de mediano caudal— iluminados
del hogar por los rojos resplandores,
los campesinos rostros atezados.
Quiso heredar. ¡Oh guindos y nogales
del huerto familiar, verde y sombrío,
y doradas espigas candeales
que colmarán las trojes del estío!
Y se acordó del hacha que pendía
en el muro, luciente y afilada,
el hacha fuerte que la leña hacía
de la rama de roble cercenada.
............................................................
Frente al reo, los jueces con sus viejos
ropones enlutados;
y una hilera de obscuros entrecejos
y de plebeyos rostros: los jurados.
El abogado defensor perora,
golpeando el pupitre con la mano;
emborrona papel un escribano,
mientras oye el fiscal, indiferente,
el alegato enfático y sonoro,
y repasa los autos judiciales
o, entre sus dedos, de las gafas de oro
acaricia los límpidos cristales.
Dice un ujier: "Va sin remedio al palo".
El joven cuervo la clemencia espera.
Un pueblo, carne de horca, la severa
justicia aguarda que castiga al malo.